Ordenaciones en Gricigliano



Del 29 de junio al 3 de julio ha sido un tiempo de gracia para la Iglesia. Durante esta semana once seminaristas de primer año, entre ellos dos españoles, tomaron la sotana y recibieron la tonsura de parte de Su Excelencia Monseñor Perry Obispo Auxiliar de Chicago, y once diáconos, entre ellos un español, fueron ordenados sacerdotes por Su Eminencia el Cardenal Burke, Patrono de la Orden de Malta. Además muchos seminaristas recibieron las diferentes órdenes menores y mayores.

La semana comenzaba el domingo 28 de junio, con la recepción de las familias y amigos del Instituto de Cristo Rey Sumo Sacerdote, en el seminario San Felipe Neri de Gricigliano para la cena.

Al día siguiente tuvo lugar en la iglesia San Miguel y San Cayetano de Florencia la toma de sotana de los seminaristas que habían finalizado el primer año. Recibieron la sotana de manos de Monseñor Wach, Prior general del Instituto de Cristo Rey Sumo Sacerdote, en una magnífica ceremonia. Con presencia de numerosos fieles españoles del Instituto fácilmente reconocibles porque varias de las señoritas portaban la hermosa mantilla española.

El martes, en la capilla del Seminario, en Gricigliano, tuvo lugar la tonsura de los seminaristas que habían recibido la sotana y la recepción de las diferentes órdenes menores por parte de los seminaristas que estudian filosofía y a los de primer curso de teología, presidida por S.E. Monseñor Perry Obispo Auxiliar de Chicago. Este día los dos españoles que habían recibido la sotana recibieron también la tonsura y otros 3 seminaristas españoles recibieron diferentes órdenes menores.

Las órdenes mayores de subdiaconado y diaconado fueron conferidas por Su Excelencia monseñor Corleone, arzobispo de San Francisco (Estados Unidos) el día miércoles en la iglesia de San Miguel y San Cayetano.


La mayor celebración de la semana fue el día jueves, cuando el cardenal Burke ordenó sacerdote a 11 diáconos entre ellos el Canónigo español Don Federico de Martín. Para festejar este gran día, tuvimos una adoración al Santísimo con un Te Deum de acción de gracias por los dones divinos, y una cena en el seminario, con la asistencia de más de 850 personas, que finalizó con los discursos de los superiores y los fuegos artificiales al son de la música clásica.

 El viernes por la mañana, con emoción, celebraron sus primeras misas  los nuevos canónigos del Instituto.